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En la Despensa del Berral, situada en la la Sierra de Segura, ofrecemos una selección de los mejores jamones ibéricos de España, elaborados con una cuidada tradición y un sabor incomparable. Nuestros jamones se complementan perfectamente con el vino español, una bebida de gran calidad y variedad que se adapta a todos los gustos y bolsillos.
El vino es un producto de prestigio internacional, reconocido por su excelente relación calidad-precio y por su capacidad de maridar con la gastronomía más exquisita. Ya sea para una ocasión especial o para el día a día, el vino español es un placer que no puede faltar en su mesa.
En nuestra web podrá encontrar una amplia gama de vinos, desde los más clásicos hasta los más innovadores, para acompañar a nuestros jamones ibéricos y disfrutar de una experiencia gastronómica única. Le invitamos a descubrir el sabor de la Sierra de Segura con nuestros productos, que le harán sentir el placer de lo auténtico.
Te recomendamos que optes por un tinto joven, con una acidez equilibrada, que respete el gusto del jamón.
Para disfrutar del jamón, no hay una regla fija sobre el vino que lo acompañe en el maridaje. Depende de tu gusto personal y de la ocasión. Sin embargo, si quieres una recomendación, te sugerimos que optes por los vinos blancos ligeros y refrescantes, o por los que tienen un poco de gas, como los cavas. Estos vinos ayudan a limpiar la boca de la grasa del jamón y a realzar su sabor. También puedes probar con una cerveza fría, que tiene un efecto similar.
La paleta y el jamón son dos productos derivados de las patas del cerdo, pero tienen características distintas.
La paleta se obtiene de la pata delantera, que es más delgada y ligera que la trasera, de donde se saca el jamón. El jamón tiene más tamaño, grosor y forma redondeada.
Estas diferencias influyen en el proceso de curación, que suele ser más breve para la paleta que para el jamón.
Lo primero que debes hacer es colocar el jamón con la pezuña hacia abajo, ya que así empezarás por la zona más seca y dejarás que el resto se vaya curando más. Luego, debes usar un cuchillo jamonero bien afilado y hacer lonchas finas y pequeñas, siguiendo el sentido de las fibras. Así podrás disfrutar de todo el sabor y la textura de nuestros jamones.
Lo primero es cortar el jamón cada día por la zona que ya está abierta, para evitar que se seque demasiado.
Lo segundo es taparlo con un paño limpio que no deje pelusas, para protegerlo de la luz y el aire.
No se debe usar la grasa del jamón para cubrirlo, porque puede alterar el sabor y el aroma del jamón, ya que actúa como una esponja.
Para conservar el jamón curado, hay que tener en cuenta el estado y el peso del producto, así como la temperatura y la humedad ambiental.
Si el jamón está entero, puede durar hasta tres meses sin perder calidad, siempre que se mantenga en un lugar fresco y seco. Sin embargo, una vez que se abre, conviene consumirlo en un plazo máximo de dos semanas, dependiendo del tamaño y la climatología.